Nicodemo era un judío por naturaleza y decendiente carnal de Habraham, a él Jesús le declara que para poder ver el reino de Dios ( ser de la simiente espiritual de Habraham a quien le fueron hechas las promesas ) era necesario nacer de nuevo, Nicodemo no entendió en qué forma debía ser ese nacimiento, pero Jesús se lo declara y le dice. '' El que no naciere de agua y del Espïritu no puede entrar al reino de Dios''. Juan 3:1-5.
La simiente de Habraham por la promesa espiritual, no carnal, pues Jesús le dijo a Nicodemo que lo que es nacido de la carne, carne es (por esta razón es también descendiente de una simiente carnal). Y lo que es nacido del Espíritu espíritu es y por lo tanto descendiente de una simiente espiritual (la iglesia), la cual es de Habraham. Por esto para ser de la simiente espiritual de Habraham, la cual es la Iglesia, se tiene que nacer del agua y del espíritu. San Mateo 3:13-17.
El mismo Señor Jesús cumpliendo con esta justicia, es dado por cabeza de la Iglesia. (Efesios 1:22-23; Col. 1:18-20). El Señor Jesús después de haber recibido el bautismo por Juan el Bautista, Dios dio testimonio de él diciendo: '' Este es mi hijo amado ''. (Mateo 3:17). Cumpliéndose también lo que dijo el Espíritu Santo pormedio del Salmista David diciendo: '' Jehová me ha dicho mi hijo eres tú, yo te engendre hoy ''. (Salmo 2:7; Hebreos 1:5-6). Desde entonces dio principio a su ministerio. (San Mateo 4:17). Y a organizar la simiente espiritual de Habraham. (Lucas 19:10; Filipenses 2:7-11).
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