Texto principal Judas 1:4
Porque algunos hombres han entrado encubiertamente, los que desde antes habían sido destinados para esta condenación, hombres impíos que convierten en disolución la gracia de nuestro Dios, y niegan a Dios el único soberano, y a nuestro Señor Jesucristo.
Introducción
Alguien escribió recientemente: El siglo presente es de adelantos tecnológicos y físicos pero de retrasos morales, y es porque nuestras escuelas están en crecimiento y nuestras Iglesias en decadencia. Hace siglos Dios inspiro a dos hombres. (Pedro y Judas), para amonestar a la Iglesia sobre esta decadencia que Él llamó LIBERTINAJE, y que es la causa de que aún la sociedad esté en decadencia moral. El LIBERTINAJE en sí es: El desenfreno en las obras o en las palabras. Es: Falta de respeto a la Religión. La Iglesia misma está sufriendo el embate de este LIBERTINAJE porque en su seno mismo es donde se lleva este LIBERTINAJE.
LA CAUSA DEL LIBERTINAJE
Cuando Judas escribió su carta lo hizo para preparar doctrinalmente a la Iglesia y la exhorta anticipándole de la existencia de hombres que en su seno mismo convierten en libertinaje la gracia de Dios la única característica de estos hombres es que son impíos porque niegan al Soberano Dios (Tito 1:15). Y es que el libertinaje empieza cuando se niega a Dios y la efectividad de la obra de Jesús, dejando de tener el temor reverencial que Dios nos pide. (Deuteronomio 10:12), y cambiando los valores por los conceptos humanos, llamándole a lo bueno malo y a lo malo bueno (Isaías 5:20), viviendo ya no como Dios nos pide que vivamos sino como nosotros queremos vivir.
EL LIBERTINAJE PERSONAL
Cuando se deja de tener temor de Dios la persona misma cambia sus valores y ya no ve las cosas como estas en realidad son: Hoy es más cuando se oye en las Iglesias preguntar a los miembros, si esto es bueno o si es malo, si se puede hacerse y lo curioso es que cualquiera que sea la respuesta: lo hacen pues les es fácil pintarse, ir al cine, tomar una copa, una cerveza,, fumar un cigarro, tener relaciones sexuales ilícitas, ciertas diversiones (bailes, tardeadas, banquetes, revistas pecaminosas, pornografía, etc.), y después de hecho la respuesta clásica es: yo no lo sabía; pero si aun los malos ángeles fueron guardados en prisiones porque no guardaron su dignidad.
Dios no nos permite todo (1 Corintios 10:23), porque no todo es conveniente a nuestras vidas porque Dios nos llama a SANTIDAD (1 de Tesalonicenses 4:7), y si no guardamos esa SANTIDAD termina en desenfreno LIBERTINAJE y en el infierno (Judas 1:7).
LIBERTINAJE EN LA IGLESIA
Actual mente hay Iglesias para las cuales no hace daño el LIBERTINAJE y tienen sus argumentos que defienden de ser posible con citas Bíblicas y han olvidado el llamamiento de Dios a ser Iglesias sin mancha y sin arrugas, normal mente sus preceptos son emanados de conceptos humanos sobre el bienestar de la persona que los mandamientos de Dios. Para los nuevos convertidos, las salidas a retiros espirituales, son excursiones o días de campo, no se les habla de la SANA DOCTRINA ni de ofrendas para los necesitados, para la viuda y el huérfano, para el enfermo, hoy solo se pide ofrenda para el pastor para el obispo y lo nuevo para los pastores regionales que muchas de las veces ni a sus mismos miembros de su congregación visitan y en vez de ofrendar venden productos o hacen rifas, las sociedades femeniles y varoniles los coros y grupos de canto más parecen clubes de reuniones sociales que grupos de la Iglesia. A los jóvenes se les enseña a juzgar se les enseña a compartir sus sentimientos con el líder juvenil se les enseña a vestir modernamente, para deberás ser joven. A los niños ya no se les enseña la Palabra de Dios hoy les ponen instructores para entretenerlos y que les enseñen canciones bonitas para motivarlos hay poder en Jesucristo hay poder en Jesucristo. Todo este cambio de actitudes en nada beneficia a la Iglesia que ya una vez permitió que el paganismo se mezclara con ella en el tiempo de (Constantino), cuando la Iglesia se institucionalizó y creo la abominación más grande de todos los siglos, sólo por perder el temor reverencial a Dios. Estimados lectores hermanos en Cristo no perdamos los valores espirituales que Dios nos ordenó, ni permitamos que el mundo se posesione de la Iglesia. Vivamos la SANA DOCTRINA defendamos con valor y honestidad la fe que fue dada una vez a los Santos y hablemos claro que Dios quiere SANTIDAD y no LIBERTINAJE, ni tibiezas de su Iglesia. Dios quiere una Iglesia sin mancha ni arruga no clubs sociales, no permitamos que el LIBERTINAJE entre a nuestras congregaciones y a nuestras vidas.
Fraternalmente
Tisbita hombre de fe
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