Dar más de lo que se espera de nosotros nos otorga el derecho de recibir más de lo que esperábamos.
Sólo quienes están dispuestos a seguir esta verdad alcanzarán sus metas, porque la vida sabe pagar con abundancia a los que invierten con generosidad su talento, su tiempo y su trabajo.
Los perdedores esperan recibir antes de dar, y se quedan esperando para siempre. Los ganadores comprometen toda su capacidad en cada uno de sus actos y al canzan la excelencia.